XXXVII
Congreso de la Sociedad Española de Inmunología Clínica y Alergología Pediátrica
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los 6 últimos meses del 2010, se valoró la
presencia de asma en 119 niños que, con-
sultaron de modo consecutivo, por rinitis
alérgica, 40 de ellos (33,6%) presentaban
asma, episódicas en el 53% de los casos,
persistentes moderadas en 29% y persis-
tentes severas en el 3% de los casos.
Así pues, de acuerdo a lo anteriormente
dicho, consideramos adecuada la cifra de
coexistencia proporcionada por el docu-
mento ARIA: aproximadamente en el 80%
de los pacientes asmáticos presentan, ade-
más, rinitis y el 40% de los pacientes afec-
tos de rinitis asocian asma, siempre que el
médico que controla al niño esté atento e
investigue la presencia de asma en los ni-
ños diagnosticados de rinitis, y la de ésta
en los niños diagnosticados de asma.
Estudios longitudinales
Lo que no pueden demostrar los estudios
transversales es qué comienza antes: la ri-
nitis o el asma, así como el grado de co-
existencia de ambas enfermedades en la
historia natural de la enfermedad. Existen
pocos datos con los que se pueda respon-
der a estas preguntas. El ya mencionado
trabajo de Masuda et al.
23
intenta respon-
der a esta pregunta encontrando que la
distribución del comienzo de la rinitis o el
asma fue similar. Aproximadamente en un
33% de los casos se inició primero la rinitis
(edad media 2,9 ± 1,7 años), en otro tercio
se inició primero el asma (edad media 2,8
± 1,9 años), y en el resto al mismo tiempo.
Los estudios de cohorte pueden relativa-
mente aportar luz a algunas de estas cues-
tiones. En el estudio MAS (Multicentre
Allergy Study), en Alemania, se siguieron a
1.314 niños desde el nacimiento hasta los 13
años. Se determinó anualmente IgE especí-
fica frente a alérgenos y se fue inquiriendo
cada año sobre la aparición de síntomas
de asma y rinitis. Se dividió a la muestra
en dos grupos: Uno: niños cuyo padres no
eran atópicos. Dos: niños en los que alguno
de sus padres era atópico. La prevalencia
de la rinitis alérgica en el primer grupo au-
En una posición intermedia se encuentran
aquellos trabajos que se han llevada a cabo
mediante cuestionarios como el ISAAC, y
otros
19,23
.
Mención especial merece el trabajo de Ma-
suda et al.
22
. Este trabajo se llevó a cabo
en 130 niños asmáticos, consecutivamente
diagnosticados por alergólogos a lo largo
de un año, en los que se analizó la presen-
cia o no de rinitis alérgica, por otorrinola-
ringólogos con una metodología diagnós-
tica muy exigente. Previamente se pasó a
los padres de todos los pacientes un cues-
tionario sobre si sus hijos presentaban o
no síntomas de rinitis en el que también
se preguntaba si habían sido, o no, diag-
nosticado previamente de rinitis por algún
médico. De los 130 niños asmáticos, 101
(77,7%) fueron diagnosticados de rinitis
alérgica por los ORL, 27 leve, 42 modera-
da y 20 severa; 75 (58%) habían sido diag-
nosticados previamente de rinitis por un
médico. La sensibilidad del cuestionario
para detectar niños con rinitis fue del 88%
(89/101) pero la especificidad fue del 31%
(9/27), el valor predictivo de positividad fue
del 81,7% y el valor predictivo de negativi-
dad de 42,9%. El cuestionario fue positivo
en el 69% de los niños que no fueron diag-
nosticados de rinitis alérgica por los otorri-
nolaringólogos.
El estudio RINAIR
22
llevado a cabo en Es-
paña en pacientes adultos muestra que
el 71% de los asmáticos atendidos en las
consultas de neumología tienen rinitis,
que existe una relación estadísticamente
significativa entre la gravedad del asma y
la rinitis y que la atopia se relaciona con el
asma asociada a rinitis con un OR de 6,25.
En nuestra unidad se llevó a cabo un estu-
dio encaminado a valorar la coexistencia,
entre sí, de ambas enfermedades. Durante
los 6 primeros meses del año 2010, se valo-
ró la presencia de rinitis en 90 niños asmá-
ticos que consultaron de modo consecuti-
vo en nuestra unidad, 77 de ellos (86,5%)
la presentaban. En el 63% de los casos fue-
ron leves, el 22% moderas y el 15% seve-
ras de acuerdo a los criterios ARIA. Durante
