SEICAP ÁVILA 2013 - page 178

178
o miedo a repercusiones legales) como de
los sanitarios (por miedo a efectos secun-
darios). En este contexto, es prioritario
mejorar la educación sanitaria de médicos,
familiares y niños, para asegurar un uso
adecuado de esta medicación que puede
salvar la vida.
En este simposium se tratarán aspectos re-
lacionados con la anafilaxia en el niño y el
adolescente, apasionante campo en el que
aún nos queda camino por recorrer. Los
ponentes tratarán de contestar a pregun-
tas como las siguientes:
¿Cuál es la mejor definición de anafilaxia?
¿Sabemos reconocer una reacción anafi-
láctica en un niño? ¿Qué utilidad tiene la
determinación de traiptasa sérica basal y
post-anafilaxia?
¿Cuáles son los mecanismo farmacológi-
cos de acción de la adrenalina en la ana-
filaxia?, ¿a quién indicar, cuándo y cómo
administrar una dosis de adrenalina auto-
inyectable (AAI)?
¿Cómo podemos mejorar el diagnóstico y
tratamiento de la anafilaxia?
Bibliografía
1.
Cohen SG. Portier, Richet and the disco-
very of anaphylaxis : A centennial. J Aller-
gy Clin Immunol 2002; 110: 331-6.
2.
Sampson HA, Muñoz-Furlong A, Campbell
RL, Adkinson NF, Bock SA, BranumA, et al.
Second symposium on the definition and
management of anaphylaxis: summary
report-Second National Institute of Allergy
and Infectious Disease/Food Allergy and
El reconocimiento precoz de los síntomas
de anafilaxia y el inicio rápidodel tratamien-
to con adrenalina son críticos para preve-
nir casos graves e incluso la muerte, pero
paradójicamente los conocimientos de los
pediatras sobre anafilaxia son escasos
5,6
.
En la infancia estas reacciones suelen pro-
ducirse en el ámbito extradomiciliario (ex-
cursiones, comidas fuera de casa y en el
colegio), ocurriendo la mayoría de reaccio-
nes anafilácticas letales cuando no existe
adrenalina disponible
7
. Los dos grandes
grupos de sustancias que producen este
tipo de reacciones en la edad pediátrica
son los alimentos (30-50% de los casos) y
el veneno de himenópteros, y menos fre-
cuentemente fármacos, látex, ejercicio y
medios de contraste radiológico. En niños
son factores de riesgo de anafilaxia grave
7,8
la adolescencia y la existencia de enfer-
medades de base, especialmente asma y
alergia alimentaria.
Pese a que la mayoría de pediatras reco-
nocen haber leído guías de tratamiento de
anafilaxia, no hay criterios claros de indi-
cación de adrenalina autoinyectable (AAI)
6
,
lo que se asocia a un déficit de prescrip-
ción en casos en los que estaría indicada
6,9
.
Además, existe escasez de conocimientos
tanto en los padres de niños con riesgo de
anafilaxia como en los propios pediatras,
quienes fallan a la hora de aplicar los AAI
10
.
Ello contribuye a que pese a ser el trata-
miento de elección, exista reticencia a la
hora de administrar adrenalina intramus-
cular tanto por parte de la población no
sanitaria (por desconocimiento, ignorancia
Simposium
1...,168,169,170,171,172,173,174,175,176,177 179,180,181,182,183,184,185,186,187,188,...466
Powered by FlippingBook